Las leyes inútiles debilitan las necesarias

Así lo decía Montesquieu: «Las leyes inútiles debilitan las necesarias». Tal vez podríamos cambiar «inútil» por «estúpida».

Según nuestros legisladores, y a raíz de algunos lamentables ataques de perros contra personas, la peligrosidad de un canino se mide en kilogramos. Así, todo can que pesé 35 ó más kilogramos se convierte en un animal peligroso, del cual habría que contratar seguro contra terceros y pasar exámenes (algo así como obtener licencia) para criar este tipo de mascotas.

Poco antes de la inundación nos regalaron un Golden Retriever, que a sus 7 meses pesa 28 kilogramos, y aún le quedan 5 meses más para seguir creciendo. Podría llegar al filo de ser un animal peligroso, independiente que los Golden Retriever, junto con los Labrador, están entre las razas más dóciles, éstos últimos utilizados comúnmente como lazarillos.

Así, un San Bernardo -que puede pesar entre 68 y 90 kilogramos- siguiendo la lógica de nuestra inteligente casta política, ha de ser feroz. Sin duda que para ellos, «Beethoven» es una película de terror.